martes, 13 de noviembre de 2007

VERGA PAPA, YO SÍ QUIERO A PAVÁN


Paván es alegórico de sabiduría.
Gordo filosófico de penoso andar
Luminario excéntrico de vivarachos ojillos
Paván es y sigue siendo una vaina demasiado bien.
-¿Anybody home?, y golpeteaba con su bastón en las cabezas de guevo que calentaban los pupitres
Paván: ahora es que vengo a comprender la verga de la cueva y sus sombras...
Pues de aquellas horas en las que nos sudaba el culantro, oyendo tus clases, tus cuentos,
Sólo quedan lúcidos recuerdos, de cómo tú chico, Paván, nos decías en la cara lo bruto que éramos.
¡Ay Paván, mi hermano, amigo, profesor! ¡Por qué coño e la pepoide no haces retroceder el tiempo!
¡Para aprenderme bien la lección!
Verga Paván, qué arrecho chico... Qué bolas las tuyas, nojoda...
De Posmos ácidos como el Niche
De Racionalistas salvajes como el Spinoza
De Empíricos despiadados como el Locke
De Idealistas dialécticos como el Hegel
O de Positivistas hediondos como el Comte
¡Naguará Paván!, que tengo a Kant en el orificio
Estoy fenomenológico de volver a tus coscorrones
Y ando Adornado con la escuelita de Frankfurt
Ya no me importa, Paván, que me hayas botado del salón
Por blasfemar a los griegos, por dormirme con Ricoeur
Vente ya que te quiero dar un abrazote,
Mi goldo panita, riquicuro y existencial
¡Ave Paván!
Y que viva Vattimo.

Aguacate Spósito, Conde de Kerequechúa
Nostálgico empedernido singular

3 comentarios:

Joaquín Ortega dijo...

Q belleza bro, todo un ejercicio hermeneútico-nostálgico...jejejejeje

un bacio nero

J

Miss Oogie Boogie dijo...

Jojojo, cómo olvidar al profe...

Anónimo dijo...

iuiuiuiuug